La legalidad del CBD varía según el país y la región. En muchos lugares, el CBD derivado del cáñamo (con menos del 0.3% de THC) es legal. Sin embargo, las leyes pueden diferir significativamente, por lo que es esencial verificar las regulaciones locales antes de comprar o usar productos de CBD.

El CBD se ha estudiado por sus posibles beneficios para la salud, que incluyen el alivio del dolor, la reducción de la ansiedad y la depresión, la mejora del sueño, la disminución de la inflamación y la ayuda en el tratamiento de afecciones como la epilepsia, la esclerosis múltiple y la artritis. Aunque los estudios son prometedores, se necesita más investigación para confirmar estos beneficios y entender mejor cómo funciona el CBD.

El CBD es generalmente bien tolerado, pero puede causar efectos secundarios en ciertas personas, como sequedad de boca, diarrea, reducción del apetito, somnolencia y fatiga. Estos efectos son generalmente leves y temporales. Es importante consultar con un médico antes de comenzar a usar CBD, especialmente si se toman otros medicamentos.

• Espectro completo: Contiene todos los cannabinoides, terpenos y otros compuestos naturales de la planta de cannabis, incluyendo trazas de THC.
• Espectro amplio: Contiene múltiples cannabinoides y terpenos, pero sin nada de THC.
• Aislado de CBD: Contiene solo CBD puro, sin otros cannabinoides ni terpenos.

El CBD no es adictivo y no produce efectos psicoactivos. De hecho, algunos estudios sugieren que el CBD puede ayudar a tratar la adicción a otras sustancias, incluidos opioides y alcohol, al modular los circuitos cerebrales relacionados con la adicción.

Los terpenos son compuestos aromáticos presentes en la planta de cannabis que contribuyen a su aroma y sabor. También pueden influir en los efectos terapéuticos del CBD a través del “efecto séquito”, donde los terpenos y los cannabinoides trabajan juntos para potenciar los beneficios del otro y así conseguir dicho efecto.

El CBD puede ayudar a mejorar el sueño en algunas personas al reducir la ansiedad, el dolor y otros factores que pueden interferir con el descanso. Aunque la investigación es preliminar, algunos estudios sugieren que el CBD puede influir positivamente en la calidad del sueño, ayudando a las personas a quedarse dormidas más rápidamente y a tener un sueño más profundo.